El campamento de verano es una de las actividades más esperadas del curso tanto por niños/as, jóvenes y sus familias, como por nuestro equipo educativo. En nuestro modelo de intervención social, el campamento es el espacio más idóneo y completo donde culminar todos los objetivos planteados durante el curso desde los diferentes proyectos.

Como viene sucediendo en los últimos años, hemos vuelto a ir a la playa de Alcossebre (Castellón), pero esta vez nos hemos instalado en cabañas, donde hemos disfrutado de 8 días intensos llenos de actividades, juegos y veladas increíbles ambientadas en la supervivencia en una isla desierta.

A través de la ambientación del campamento hemos aprendido a adaptarnos y a convivir todos juntos superando los retos que nos hemos encontrado en el camino gracias a la cohesión grupal y el gran trabajo en equipo.

Esto mismo, ha sucedido dentro de nuestro equipo de educadores y educadoras, que gracias a su cohesión y espíritu colectivo ha sido capaz de adaptarse a las complicaciones e imprevistos que han ido surgiendo a lo largo de los días.

Tras una semana desde que volvimos, hacemos un buen balance del campamento. Nuestros/as menores han disfrutado muchísimo de las actividades y de cada momento vivido que, seguro, serán recordados a lo largo del verano.

También, han sido días intensos que han sacado las mejores capacidades de nuestro equipo de educadores y educadoras, a quiénes, les agradecemos enormemente sus ganas y entusiasmo, pues son una pieza básica para el éxito del campamento.

A nuestro gran equipo, MILLONES DE GRACIAS.

También nuestro agradecimiento al Programa Caixa Proinfancia por su colaboración en la financiación de esta actividad.

 

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